Si bien los niveles del PIB volverían a niveles prepandemia hacia mediados de 2022, las cicatrices económicas y laborales, así como la variabilidad de los enfoques de estímulo fiscal de cada nación obligarían a tomar medidas adicionales para una recuperación inclusiva.
El Foro Económico Mundial (WEForum por sus siglas en inglés) publicó su última encuesta de economistas jefe, que en esta oportunidad se centra en las expectativas de recuperación del PIB global para 2022, así como en los puntos clave de lo que será la economía pospandémica, entre los que destacan una alta probabilidad de cicatrices debido a una ola de quiebras retrasada, así como la búsqueda de una combinación adecuada de políticas fiscales y monetarias.
No obstante, los pronósticos iniciales se antojan alentadores si se tiene en cuenta que la tasa estimada de crecimiento del PIB para 2021 se ubica alrededor de 6%, y la mayoría espera una recuperación del PIB mundial a su nivel anterior al COVID-19 para la primera mitad de 2022. Esto vendría de la mano con nuevas ventajas para las empresas y trabajadores que están saliendo del año de la pandemia, así como un mayor compromiso y márgen de maniobra para invertir en tecnologías y competencias ecológicas.
Las cosas se empezarían a complicar al revisar los diferentes caminos hacia la recuperación total, debido a que los enfoques del estímulo fiscal de cada país difieren ampliamente en alcance y revelan una gama de prioridades en términos del tipo de transformación económica a más largo plazo. Esto plantea un desafío importante a los gobiernos a la hora de presentar planes suficientemente ambiciosos como para transformarse verdaderamente, sin excederse en el gasto hasta un punto que genere desperdicio por una mala focalización y una implementación apresurada.
Dichos riesgos en la transición hacia una economía pospandémica podrían aumentar el riesgo de cicatrices debido a una ola demorada de quiebras, seguida de cicatrices en el mercado laboral que podrían originarse debido a una recuperación incompleta del mismo. A esto podría sumarse una fragmentación de las cadenas de valor globales, agregó la información.
Lo anterior provocaría que los bancos centrales den mayor prioridad a la estabilidad de precios, teniendo en cuenta que las diferentes capacidades de cada gobierno para intervenir han aumentado las brechas existentes entre los países que pudieron pagar las medidas de rescate fiscal y las vacunas y los que no.
Este panorama ha generado que expertos consultados por el WEForum idearan una lista de alternativas para asegurar una recuperación económica inclusiva para 2022, que incluyen una política fiscal y monetaria, condiciones óptimas de trabajos y salarios, el impulso a los sistemas de educación y capacitación, equidad y justicia social, mayor acceso a nuevos mercados y un análisis más profundo a los riesgos que pueden venir de la mano con la transformación tecnológica.
A su vez, los economistas jefes insistieron en que los próximos meses serán críticos para poner la transición climática en el camino correcto, factor en el que “la cooperación global será clave”. Al respecto, los reportes destacaron que los líderes empresariales tienen grandes expectativas de que los formuladores de políticas brinden orientación oportuna, inversiones públicas y condiciones marco confiables, ya que uno de los mayores cuellos de botella para la inversión privada en la transición verde en la actualidad es la incertidumbre política.