Cinco fintechs latinoamericanas captaron rondas de inversión de más de cien millones de dólares en este año turbulento. Para 2021, el embedded finance luce como sector de creciente atención.
Pese a la incertidumbre provocada por el nuevo coronavirus, las inversiones en el sector fintech no se detuvieron, y así lo demuestran las diversas rondas de capital -y un par de unicornios- que se consolidaron este año.
Ante la coyuntura, los inversionistas centraron su atención en nuevos puntos de valor, priorizando unas verticales más que otras, pero siempre colocando la tecnología y la capacidad de innovación en la mira. Así, los negocios que atrajeron más atención fueron los enfocados en banca, crédito, última milla, marketplaces y pagos, que se vieron beneficiados por el avance de las compras online y el retroceso del uso de efectivo.
Los inversores también se están acercando a iniciativas que combinan servicios financieros y ventas minoristas, una tendencia del mercado que esperan siga creciendo en el 2021.
La escena de las inversiones sufrió una especie de stand by cuando la pandemia recién llegó a la región. Pero, según los expertos, desde hace 6 meses los fondos y firmas de capital de riesgo reactivaron sus operaciones, ciertamente guardando algunas precauciones, pero sin cerrar sus billeteras.
Para Héctor Shibata, director de inversiones y portafolio en AC Venture, fondo corporativo de venture capital, este es un momento ideal para que inversionistas y empresarios “se lancen al mercado a innovar, emprender y construir soluciones a problemas reales, buscando generar valor y desarrollo económico”.
Con la llegada de la pandemia los fondos han vuelto cada vez más interesados en ver la rentabilidad financiera de las empresas; es decir, métricas de retorno, cash flow y capacidad de monetización, algo que no consideraban tan a profundidad el año pasado, sostiene Shibata.
Los financistas están priorizando empresas en crecimiento que ya presentan tracción, y donde han logrado alinear el producto-market fit con el producto-distribution fit; es decir, que tienen desarrollo de productos o servicios que satisfacen una demanda real y creciente del mercado.
“Es mucho más fácil hacerlas crecer, que una empresa que apenas está naciendo en el mercado”, dice Shibata en referencia a las rondas de capital semilla.
“Los fondos independientes y corporativos voltearon a revisar a las empresas del portafolio asegurando temas de (cash) runway para sobrellevar la pandemia; y, por otro lado, el tema de las operaciones, que estas realmente estuvieran sólidas”, explica.
Asimismo, para el siguiente periodo, el ejecutivo adelanta que las soluciones financieras que se distribuyen por otros canales perfilan como soluciones atractivas para colocar capital.
“Algo que viene para quedarse es el embedded finance, la habilidad de decir yo soy un retailer y lo que quiero es vender seguros o brindar préstamos. Apenas estamos viendo la punta del iceberg. Hay muchas empresas que están brindando productos o servicios financieros de ese tipo”, adelanta.
Sean jugadores físicos o virtuales, los servicios financieros adicionales serán uno de los focos de atención para el 2021, ya que funcionarán como una herramienta de retención, una oportunidad que probablemente traiga consigo muchas alianzas entre fintech, bancos y startups de tecnología.
“Los ciclos de innovación y tecnológicos cada vez se están haciendo mucho más cortos”, señala Shibata.
La búsqueda de innovación, tecnología y nuevos modelos de negocio ha seguido su camino exploratorio este año, un hecho que se ha evidenciado con el levantamiento de importantes rondas de inversión en América Latina.
Estas son las fintech latinoamericanas que recibieron los montos de inversión más significativos en la región este año:
El neobanco brasileño recaudó en junio US$ 300 millones de equity gracias a cinco inversores, en una operación con pocos detalles revelados.
Aunque los siguientes pasos no han sido develados, este año vimos grandes movimientos desde la fintech, como su llegada al mercado de Colombia, la creación de un nuevo seguro de vida –Nu Vida-, y la gran demanda de su tarjeta de crédito en México, con más de 500 mil solicitudes.
En agosto de 2019, Nu recaudó otros US$ 400 millones de TCV, Tencent Holdings Ltd., DST Global, Sequoia Capital, Dragoneer, Ribbit Capital y Thrive Capital.
El banco digital brasileño Neon cerró una ronda de levantamiento de capital Serie C por también US$ 300 millones en septiembre, esta vez liderada por General Atlantic y con la participación de BlackRock, Vulcan Capital, PayPal Ventures, Endeavor Catalyst, Monashees y Flourish Ventures, inversionistas en rondas anteriores.
Con la nueva inversión, desde Neon Pagamentos informaron que se centrarían en el lanzamiento de nuevos productos, contrataciones y adquisiciones. De hecho, esta última acción se concretó hace unas semanas cuando el startup compró Consiga+, una plataforma que otorga créditos por nómina.
La base de clientes del startup sigue creciendo, e informaron que entre marzo y septiembre sus usuarios aumentaron un 26%.
La fintech brasileña de préstamos se sumó a última ahora a las inversiones más generosas reportadas en el sector fintech de este año, al cerrar una ronda de inversión por US$ 250 millones, liderada por el inversor LGT Lightstone, y otros financistas como Tarsadia Capital, Wellington Management, e.ventures y Sunley House Capital -una filial de Advent International, SoftBank 9984.T , Kaszek y Amadeus Capital Partners y VEF.
El nuevo monto, explican desde Creditas, servirá para financiar la expansión internacional e impulsar el crecimiento de la cartera crediticia.
Como se recuerda, en julio, la fintech aterrizó en el mercado de México como parte de su plan de internacionalización en la región.
La fintech de pagos transfronterizos se convirtió este año en el primer unicornio de Uruguay al recaudar US$ 200 millones en una ronda de financiación liderada por General Atlantic. El proceso de financiación dejó valuada a la fintech en US$ 1.200 millones.
Desde su sede matriz en Montevideo, explicaron que los siguientes pasos tras la nueva contribución serán continuar expandiéndose hacia otros 13 nuevos mercados, que incluyen países de América Central, África, y el sudeste asiático.
La empresa ya atiende a unas 450 empresas en 20 países, facilitando su participación en el comercio electrónico a través de la conexión a pagos digitales.
La fintech mexicana de créditos al consumo y para pymes recibió en el segundo trimestre del año una inversión por US$ 100 millones gracias a una ronda Serie B liderada por Softbank.
Para el startup el monto recaudado en abril les permitió mantener e incrementar su oferta de créditos, durante los meses más duros de la pandemia y el confinamiento. Adicional a ello, también informaron hace unos meses que la ronda estaría destinada a continuar con sus objetivos de internacionalización hacia otros mercados de la región, luego de ya operar en México y Colombia.
El último movimiento de la empresa fue lanzar Bontu, una plataforma financiera digital que permite a los usuarios, corporativos y personas, acceder a financiamiento a través de factoraje, adelantos de capital o ingresos, y préstamos personales.