La ronda de financiación ha sido liderada por Grupo Elektra, y ha contado también con Athos Capital y Segtech Ventures. La startup movió más de 1.000 millones de euros en transacciones en 2020.
La fintech española Unnax, la primera con triple licencia regulada por el Banco de España, ha cerrado una ronda de financiación de siete millones de euros. La nueva inyección de capital, la tercera que logra desde su fundación, le permitirá consolidar sus mercados actuales y entrar en el mercado latinoamericano con oficina propia, “especialmente en México, donde la demanda de tecnología en el sector financiero presenta una importante oportunidad para nuestra compañía”, explica a CincoDías Julián Díaz-Santos, su cofundador.
La operación, asesorada por 4Law, ha sido liderada por Grupo Elektra, uno de los mayores proveedores de préstamos no bancarios en EE UU. También han participado Athos Capital y Segtech Ventures, vehículo inversor de Prosegur. Los inversores anteriores de Unnax, como Swanlaab Venture Factory, Bankinter y el grupo de telecomunicaciones CSQ, también han participado en la ronda y siguen vinculados al proyecto.
La fintech española ha recaudado desde su fundación en 2016 algo más de nueve millones. Ese primer año logró una ronda semilla de 550.000 euros y un año después captó otros 1,5 millones. El pasado junio, Unnax se convirtió en la primera fintech española en obtener la citada triple licencia que otorga el Banco de España para poder operar como entidad de dinero electrónico, proveedor de servicios de información de cuentas y proveedor de servicios de iniciación de pagos.
“Esto nos posiciona como el único proveedor nacional habilitado para ofrecer servicios de open banking y servicios de dinero electrónico”, añade Díaz-Santos, que advierte que también ese hecho obliga a la compañía a cumplir unos estándares de seguridad, reporting y cumplimiento normativo más estricto que otros proveedores de open banking.
La compañía dispone de una plataforma multiproducto de banca como servicio (BaaS), que ofrece soluciones de pago y movimiento de dinero, datos financieros y herramientas de medición de riesgos, así como productos para la gestión de los procesos de validación de clientes, instrumentos de verificación de la identidad y prevención del fraude, entre otras.
Unnax tiene hoy una plantilla de 53 empleados y opera en cuatro países (España, Italia, Francia y Portugal), con servicios recurrentes y con un volumen de más de un millón de transacciones mensuales. La compañía no ofrece datos sobre sus cuentas, pero asegura que en 2020 duplicaron su facturación, pese al Covid-19, y que movieron ese año más de 1.000 millones en transacciones.
La compañía, que seguirá con sus desarrollos tecnológicos, también contempla ampliar sus acuerdos de canal para lanzar productos y soluciones junto a socios que le ayuden en su proceso de expansión global. Jordi Pérez, el otro cofundador de Unnax, asegura que con la nueva ronda de financiación y los inversores que les acompañan "la velocidad de crecimiento tanto en Europa como en Latinoamérica va a ser importante y nos permitirá posicionarnos como uno de los principales actores del sector fintech en esos mercados".
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