Para esto, la Unidad de Regulación Financiera plantea una metodología de discusión público-privada que se dará el próximo año.
En medio de los avances en materia digital que han llevado a cabo los diversos actores del sector financiero, la Unidad de Regulación Financiera (URF) propuso adoptar una regulación voluntaria para open banking o la arquitectura financiera abierta, el cual consiste en un modelo que permite que los consumidores autoricen que su información financiera y transaccional que sea consultada y utilizada por terceros para nuevos servicios y productos.
Para lograr dicha regulación voluntaria de este modelo, la URF "plantea una metodología de discusión público-privada que será desarrollada en 2021 y que nutrirá la definición del marco normativo requerido para el intercambio seguro de la información", destacó un documento publicado por a entidad.
En línea con esto, la URF destacó la reciente expedición del Decreto 1234 de 2020, por medio del cual la Superintendencia Financiera creó el Sandbox Regulatorio para actividades de las entidades financieras.
"Se promoverá el uso del sandbox regulatorio para el desarrollo de pruebas controladas sobre diferentes usos de la arquitectura abierta. Como punto de partida, el presente documento incluye una serie de reflexiones e interrogantes sobre los cuales se invita a la industria y al público en general a remitir sus consideraciones y propuestas", destacó la URF.
Además de la apuesta por el sandbox, la Superfinanciera anunció una medida que permite a las entidades financieras poner a disposición de terceros desarrolladores de API, o cualquier otro mecanismo que permita el intercambio automático de información.
La información actualizada de productos, canales, puntos de atención, servicios y tarifas, se tendrán disponibles con las condiciones que cada entidad determine y con la debida gestión de los riesgos asociados a este intercambio, según compartió la URF.
Las fintech y las metas de inclusión en la digitalización financiera
"En ese contexto la industria fintech se ha venido desarrollando de manera constante, el último año creció a una tasa de 26%, generó 7.000 empleos y como pocos sectores tienen una tasa de mortalidad muy baja (14%)", citó la URF.
Además de lo anterior, la URF rescató que de acuerdo con el más reciente reporte de Inclusión Financiera que realiza el Programa Banca de la Oportunidades y la Superintendencia Financiera de Colombia, la cifra de adultos con productos financieros a junio de 2020 ascendía a 85,9 % (31 millones de adultos) y de estos, 71,6% tienen el producto activo. Y desde el crédito, 35,4% contaban con un producto de crédito (12,8 millones de adultos).