El informe del Banco de la República analiza la recuperación del mercado laboral colombiano tras la pandemia, destacando que en 2024 se alcanzaron 23,2 millones de ocupados con una tasa de ocupación del 57,6%. Este avance ha sido liderado por las ciudades del Clúster 1, como Medellín y Bogotá, donde se ha registrado un aumento en la participación laboral, superando los niveles prepandemia. Sin embargo, en los Clusters 2 y 3, compuestos principalmente por ciudades intermedias y pequeñas, la participación laboral se ha reducido, reflejando desigualdades regionales en la recuperación. Esta dinámica ha tenido un impacto directo en las tasas de desempleo, que permanecen estables en el Clúster 3 debido a la menor participación laboral, más que a un aumento en la ocupación.
La heterogeneidad de las dinámicas entre clústeres también se refleja en la composición sectorial del empleo y la informalidad. En el Clúster 1, la recuperación ha sido impulsada por la formalización laboral y el dinamismo de sectores terciarios como transporte, educación y salud, que contribuyeron significativamente al crecimiento del empleo. En contraste, el Clúster 2 ha enfrentado dificultades, con Cartagena como un caso destacado de desempeño negativo debido a la caída del empleo en sectores como alojamiento, recreación y manufacturas. Mientras tanto, en el Clúster 3, el empleo informal se ha mantenido relativamente estable, en comparación con una reducción significativa en el Clúster 2.
Además de las fuerzas del mercado, el informe resalta el papel de políticas públicas en la recuperación del empleo formal, entre las que destaca el Programa de Apoyo al Empleo Formal (PAEF), que ha incentivado la generación de empleo formal en sectores clave. Estas políticas, sumadas a una mejora en la demanda laboral y una disminución de la brecha de desempleo respecto a la tasa no inflacionaria (Nairu), han favorecido la estabilización del mercado laboral. No obstante, persisten retos en la recuperación de grupos demográficos vulnerables, como jóvenes y mujeres en ciudades intermedias y pequeñas, quienes enfrentan mayores dificultades para reinsertarse plenamente en el mercado laboral.